Procede de la ermita de San Juan Bautista de Ruesta (Zaragoza).
S.XII. 48 cms. x 35 cms.
Pintura que representa una cabeza masculina con largo cuello. El rostro se compone de gruesas cejas, ojos almendrados de gran tamaño y color negro, nariz recta, boca cerrada y barba, aunque esta zona inferior no se conserva completa. Bajo los ojos, a ambos lados de la nariz, dos pinceladas rosadas dan color a las mejillas.
Esta pintura constituye un arrepentimiento del artista ya que fue hallada, en 1964, durante el proceso de arranque de las pinturas murales de la ermita de San Juan Bautista de Ruesta bajo el rostro del Pantocrátor que preside la bóveda.