Se abre hacia la nave con un vistoso enmarque de labores tardogóticas (s. XV) que sigue el mismo modelo de la capilla de San Sebastián que se ubica justo enfrente de esta. El retablo es barroco (s. XVIII), presidido por una voluminosa imagen de San Agustín, obispo de Hipona, que es a quien se dedica este retablo. Santa Lucía -izquierda- y santa Apolonia -derecha- lo acompañan desde los costados y en un tamaño más pequeño junto al santo, aparecen San José (izquierda) y San Pancracio (derecha). Una medalla con el corazón llameante, símbolo de este doctor de la Iglesia, corona el conjunto.