San Miguel de Ruesta (Zaragoza)

Procede de la iglesia parroquial de la Asunción de Ruesta (Zaragoza).
1510 -1515. Renacimiento. Óleo sobre tabla.
147 cms. x 80 cms.

Representación de San Miguel arcángel ataviado como guerrero, luchando contra el demonio y sujetando una balanza en la mano en el momento de pesar las almas durante el Juicio Final. San Miguel aparece como un joven alado, con nimbo, melena castaña y rostro de suaves rasgos que ladea la cabeza hacia su izquierda y dirige la mirada hacia el demonio vencido que yace a sus pies. Viste una cota de malla, una armadura minuciosamente trabajada con codales y rodilleras, una capa que cubre hasta las pantorrillas y completa su atuendo con zapatos rojos. Con su mano derecha empuña una espada de gran longitud que dirige hacia la cabeza del demonio y con la mano izquierda sujeta una balanza cuyos platos están ocupados por sendas figuras que representan a las almas que van a ser juzgadas.


La zona inferior de la composición la ocupa el demonio, tumbado sobre el suelo y pisoteado por San Miguel. En oposición a la belleza del santo, el demonio es un personaje que destaca por su aspecto monstruoso ya que su cuerpo mezcla elementos antropomorfos y animales. Su rostro presenta un aspecto cercano a la caricatura, con ojos desorbitados, nariz y boca muy grandes; asimismo tiene orejas puntiagudas, brazos con púas, largas uñas, un ojo en el vientre y garras de ave.


La escena se desarrolla al aire libre, San Miguel y el demonio se encuentran sobre un espacio terroso frente a una tapia de color rosáceo.