Hacia 1310-1330
Fresco seco arrancado y traspasado a lienzo
Proceden de la iglesia de San Esteban en Urriés (Zaragoza)
La pieza del mes de agosto representa el momento en que Eva ofrece el fruto del árbol prohibido a Adán en el Jardín del Paraíso, en el fragmento narrativo de este pasaje del Génesis ubicado en la sala del refectorio del MDJ.
Originalmente, esta pintura se ubicaba en el muro semicilíndrico del ábside de la iglesia de San Esteban de Urriés, donde se disponían escenas del Antiguo y Nuevo Testamento separadas por bandas con inscripciones aclaratorias sobre su significado.
Podemos observar como Eva le ofrece la manzana a Adán (ambos desnudos), y cómo el maestro de Urriés se aparta de la evolución rutinaria de la pintura llevado por su alegre vivacidad narrativa, su destreza como dibujante y también por cierto sentido irónico de la narración, destacando su estilo por esas figuras alargadas y muy elegantes, con un naturalismo que casi roza la caricatura. Este último rasgo se repite en otras iglesias navarras de principios del siglo XIV, pudiendo definirlas estilísticamente dentro de una tendencia francogótica o lineal.
Debemos, sin duda, destacar la expresividad de ambos personajes: Eva, que sonríe mientras le da la manzana a un Adán, en cuyo rostro podemos ver reflejado el miedo y la desconfianza frente a lo que están a punto de hacer.
¿TE HAS FIJADO EN…? Los rostros de ambos protagonistas nos muestran sentimientos en contraposición al hieratismo y la ausencia de expresión románica: Eva, con esa sonrisa maliciosa y traviesa; y Adán, echando su cuerpo hacia atrás y cuyo rostro refleja una mezcla de desconfianza y preocupación, sabiendo de lo prohibido de su acto y de la sanción que éste les puede acarrear