Enero 2012. San Juan Evangelista y San Sebastián

Siglo XV

Óleo sobre tabla

Procede de la iglesia de San Andrés de Sorripas (Huesca)

Para el inicio de este nuevo año 2012 hemos elegido como pieza del mes una pintura sobre tabla procedente de la iglesia parroquial de San Andrés de Sorripas que muestra la iconografía de dos santos cuyas festividades celebramos en estas fechas: San Juan Evangelista (27 diciembre) y San Sebastián (20 enero).

Ambos personajes aparecen representados sobre un fondo de brocado dorado y tonos verdes y un suelo de baldosas, con el que se intenta dotar de perspectiva a la escena como es habitual en la pintura gótica del siglo XV.

Ambos personajes se nos presentan como jóvenes imberbes, nimbados, y ataviados con lujosas vestimentas dotadas de volumen mediante el trabajo de los angulosos pliegues. Completan su indumentaria con sendas capas decoradas con simulaciones de pasamanería y ricos brocados realizados con aplicaciones de pan de oro.

En la parte izquierda aparece San Sebastián, santo que contaba con una gran veneración en la Edad Media debido a que a él se pedía protección frente a la peste, enfermedad muy extendida en los siglos del Medioevo. En este caso se representa a la manera de la pintura española, es decir, equipado con arco y flechas en la mano, mientras que en otros lugares será más común su iconografía como centurión romano, con traje militar o armadura, hasta que a partir del siglo XV se generalizará la representación del santo desnudo y asaeteado como recuerdo de su martirio.

Junto a él, a la derecha de la tabla se representa San Juan Evangelista en actitud de bendecir y descalzo, como es habitual, pero en esta ocasión lo vemos ataviado con unos ricos ropajes en tonos rojo y verde con los que se identifica su figura.

¿TE HAS FIJADO EN…? San Juan porta en su mano izquierda un cáliz dorado del que escapa un dragoncillo que simboliza la copa de veneno con la que fue martirizado por los sacerdotes paganos. Este atributo se generalizó en su iconografía a partir del siglo XIII.

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